Contexto internacional

Realizamos un breve repaso del estado de situación de algunas de las variables que actualmente impactan en los negocios agrícolas de la mayor parte del mundo. La guerra y su impacto, la evolución de los precios internacionales y el estado de los fletes, entre otros.

El contexto internacional de la agricultura ha cambiado. Hoy desconocemos si este cambio será únicamente temporal o se consolidará. Antes de la guerra, Ucrania era uno de los principales productores y exportadores mundiales de maíz, girasol, trigo y cebada del mundo. El conflicto ha paralizado las cosechas, sumando que las cadenas de suministro vienen alteradas por el COVID-19, impactando a la disponibilidad de granos y fertilizantes a nivel global. Pese a esto, datos actualizados indican que Ucrania está recuperando las exportaciones. Los buques comenzaron a partir de puertos ucranianos del Mar Negro, restableciéndose el comercio, a partir del acuerdo con Rusia para desbloquear las exportaciones. Rusia firmó con la ONU un memorándum para facilitar la exportación de fertilizantes y productos agrícolas rusos a los mercados internacionales.

Precios

Respecto a los precios de granos, El USDA publicó hace días su nuevo informe mensual con las estimaciones de oferta y demanda global, donde encendieron aún más las alarmas para el mercado de la soja, con un pronóstico de cosecha en Estados Unidos de 119,16 millones de toneladas, cuatro millones menos que las 123,30 previstas en agosto. Así, el stock final fue proyectado en 5,44 millones de toneladas, el nivel más bajo desde la campaña 2015/2016. De allí que la oleaginosa subió casi U$S 30 la tonelada, hasta orillar los U$S 550.

Las proyecciones del USDA para el maíz también incluyeron un ajuste en su expectativa de cosecha, de 364,73 a 354,19 millones de toneladas, aunque la caída del stock final no sería tan grave: de 35,27 a 30,95 millones de toneladas, en línea con los 30,91 millones previstos por el mercado. Por eso, la suba del cereal en Chicago fue discreta, de apenas unos U$S 4 la tonelada.

En el trigo, no hubo grandes cambios: el USDA aportó pocas novedades, al mantener estables sus previsiones sobre los volúmenes por exportar de Rusia, Ucrania, Australia y Canadá.

Fletes

Los fletes han experimentado varias oscilaciones a lo largo de todo este año 2022, aunque lo cierto es que la compleja coyuntura internacional hace imprevisible su comportamiento en los próximos meses. La contención en el precio del transporte marítimo es un hecho, según los grandes índices de referencia internacionales, como el World Container Index elaborado por la consultora Drewry.

La situación de la economía global sigue siendo de todo menos tranquila, principalmente por los altos precios de las materias primas y los problemas en las cadenas de suministros. A la guerra en Ucrania, casi cronificada, hay que sumar el bloqueo de Argelia, con su consecuente afección sobre el comercio internacional y las rutas marítimas del Mediterráneo. Además, el crecimiento en el precio del barril Brent ha provocado aumentos en los combustibles.

Si bien a nivel global, el volumen de tráficos portuarios está todavía por debajo de lo pronosticado, la reapertura de las operaciones del Puerto de Shanghái a comienzos de junio hace prever un ascenso en la demanda de contenedores. Sin embargo, en un escenario tan volátil es complicado elaborar predicciones.

 

Crisis energética

La Unión Europea está analizando medidas para mitigar el impacto de la crisis energética derivada en parte de la disposición de Rusia a recortar las exportaciones de gas a Europa tras las sanciones impuestas por Occidente por su invasión de Ucrania. Rusia suministraba alrededor del 40% del gas de la UE antes de su invasión de Ucrania. Ese porcentaje ha caído en picada hasta el 9%, ya que Moscú ha cortado el suministro a Europa, achacando los cortes a problemas técnicos causados por las sanciones occidentales.

Esta situación, complica la producción europea de materias primas, debido a que los costos se ven altamente incrementados. La crisis energética también impacta en los precios de los fertilizantes, disminuyendo las compras de los mismos, lo cual afecta de manera directa a la productividad de las cosechas y al mismo tiempo a la demanda de fitosanitarios.

Insumos

Hoy en día la situación de China, a pesar de seguir con restricciones por el Covid-19 en algunas de sus provincias, se está normalizando en cuanto a la producción de Glifosato, logrando tener buena provisión de stock, y derivando directamente en una baja en los precios debido a una mayor oferta en el mercado.

En el resto de los productos no se da el mismo caso, donde hay varios que siguen complicados en cuanto a la provisión de algunas moléculas como pueden ser Picloram, Flumioxazin, Metolaclor, Acetoclor y S-Metolaclor.

Contexto

Escasez, y aumento de precios. Las palabras que dominarán la agricultura y la industria alimentaria, según expertos y agentes del mercado. A esto se suma el aumento del precio del gas natural, lo que hace que el fertilizante sea a su vez más caro. De hecho, Rusia, Bielorrusia y Ucrania representan una cuarta parte de la producción mundial de fertilizantes.

Para la Argentina, que está comenzando la campaña de gruesa con la siembra de maíz y soja, hubo una marcada caída de las importaciones de urea de aproximadamente 42% desde inicio de año y en comparación al primer semestre de 2021. La buena noticia, es que la reciente caída en el precio de los fertilizantes permitió mejorar la relación de compras para soja y maíz.


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